Reseña o resumen
El uso del teléfono móvil acarrea exposición a radiación no ionizante. La energía de dicha radiación puede ser absorbida por el cuerpo humano (dosis absorbida). Existe cierta polémica social suscitada por parte de la población y de asociaciones ecologistas, que se acogen al principio de precaución. Varias agencias con competencias en temas de salud han publicado posicionamientos, recomendaciones y guías sobre si el uso de la telefonía móvil puede provocar tumores cerebrales, sin dar una respuesta definitiva. La problemática sobre la carcinogenicidad del uso de los móviles implica investigaciones de diferentes disciplinas que abarcan la física, la química, la toxicología, la biología, la epidemiología y la oncología. En el presente texto se analiza la capacidad que tiene la epidemiología para generar información útil para identificar asociaciones causales, a través de estudios observacionales. En concreto, se dedica especial atención a los criterios de causalidad de Sir Bradford Hill, aplicados a la evidencia epidemiológica de cara a clasificar el uso de la telefonía móvil respecto de su carcinogenicidad